Pablo Neruda escribió aquello de: “Me gustas cuando callas porque estás como ausente”. Alguno de vosotros tiene que estar encantado con mi largo silencio y otros quizá no tanto. No tengo excusas para llevar tanto tiempo sin escribir nada. Simplemente, no me salía o no me apetecía, y esto unido a mi innata falta de tiempo es el lógico resultado de este paréntesis.
La frase: “Si no tienes nada bueno que decir, mejor no digas nada” no es mía aunque siempre ha sido una de mis máximas. What do you want me to tell you? ¿qué queréis que os diga?¿que soy muy feliz para poneros green with envy? ¿que soy muy infeliz para obtener vuestra sympathy?
Hace poco escuché decir a Lucy Kellaway (en uno de sus más que recomendables podcasts que no hablan sobre finanzas publicados por el Financial Times) que “Last month scientists confirmed what surely every parent worked out long ago: “Facebook makes you unhappy”. Looking at other people’s apparently cool and glossy lives brings only misery”. Yo no quiero que nadie se sienta miserable por mi culpa, así que no escribo.
En serio, no es por falta de temas, no escribo porque tengo mucha vida a este lado del router. Pese a que tengo una lísta larguísima de temas pendientes sobre los que quiero escribir, en las circunstancias actuales ninguno me ha movido de la silla, y si no hay pasión, o emoción o como lo queráis llamar, no hay nada.
Os dejo con una de las pocas canciones sí me ha movido de la silla y que he cantado recientemente con la voz mas alta posible. Espero que os encaje escucharla ahora, porque ya deberíais saber que las canciones y los momentos son como piezas de un puzzle. Si no es el momento, just skip it:
Y con esta canción también os podeis mover de la silla si sabéis jugar a Simon Says, y además sirve para recomendaros que os suscribáis al podcast del Lucy Kellaway del FT llamado Listen to Lucy.
Suerte!!!
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